(Santiago, 27 de enero de 2020).- Valeria Pinto en la mañana de este lunes se convirtió en la primera persona trans en Chile en obtener su carnet con su nuevo nombre y sexo registral a través de la Ley de Identidad de Género (21.2120), a un mes de su implementación. Recibió su nuevo carnet por parte de las autoridades del Registro Civil Centro Bicentenario y de Lorena Recabarren Silva, subsecretaria de Derechos Humanos.
Valeria Pinto conversó con OTD Chile con su cédula en mano y agradeció a todas las personas que trabajaron y apoyaron para que se hiciera realidad este sueño para la comunidad.
“Al permitir legalmente la rectificación de cambio de nombre y sexo en el carnet de identidad (y otros documentos) luego de casi 7 años de lucha incansable las personas trans lograrán con esta ley dar un primer paso para transformar a Chile en un país un poco más justo e incluyente”, comenta Kris Cordova, coordinadore de la Unidad de OTEDUCA, quien además fue testigue de Valeria en el Registro Civil de la comuna de San Miguel donde se desarrolló la audiencia especial el 27 de diciembre de 2019.
“Me sentía niña desde los 5 años”
A un mes de que entrase en vigencia la Ley de Identidad de Género con la entrega de la cédula de Valeria se concreta el sueño de muchas personas trans que durante años lucharon para que este trámite no fuese patologizante y se realizara a través de un trámite sencillo en las oficinas del Registro Civil. Para ella tener un carnet con su nombre significa poder acceder al mercado laboral de manera formal como cualquier persona cis, derecho que lamentablemente se le ha negado hasta la fecha por ser una persona trans. “Buscar trabajo, eso es lo primero que haré. Bien sea como cajera, vendedora. Le pido a las empresas que incluyan a las mujeres trans. Es muy difícil para nosotras porque no nos aceptan.”
Valeria nació en 1983 en Tocopilla, relata que desde siempre se autopercibió como niña “desde que tenía 5 años le pedía a mi mamá que me vistiera con ropa de niña y me comprara muñecas. Ella me consentía en secreto por temor a la discriminación familiar, sobre todo porque no quería que me rechazara mi papá. Recuerdo que mi papá me obligaba a comportarme como “hombre” y corregía mis gestos femeninos. También me llevaba a Santiago para que un médico me examinara y me indicara tratamiento para ser masculino”.
Después de negarse durante años a ser la persona que quería su padre decidió irse de casa y desde los 25 años empezó sus tratamiento hormonal para adecuar su cuerpo y vivir como Valeria. Este nombre lo eligió por su significado de origen latino valerius que significa sana, fuerte, valiente y valerosa.
En relación a la seguridad de Valeria de manifestar desde los 5 años que era una niña, según datos de EncuestaT del año 2017, un resultado destacable es que 41,3% de las personas trans y de género no conforme encuestadas reconocieron que desde los 5 años no se adecuaban al género que le impusieron, mientras que un 39,4% se reconocía entre los 6 y 11 años.
Cómo era antes el cambio de nombre y sexo legal
Es un hito histórico nacional que en septiembre de 2018 el Congreso aprobara la Ley de Identidad de Género en Chile y que de esta manera se abriera un camino legal para que las personas mayores de 18 años modificaran su nombre y sexo registral a través de un trámite administrativo sencillo y que adolescentes a partir de 14 años lo hicieran con el consentimiento de sus representantes legales, dejando fuera de la ley a la niñez trans.
Pero ¿Cómo era antes esa rectificación? explica Franco Fuica, activista trans masculino, quien también luchó durante años por la ley 21.120, que antes de que existiera esta “las personas trans recurrían al tribunal civil a través de dos leyes, la primera; la ley 17.344 permitía que se modificara su nombre con el argumento que este era ridículo, que le causaba menoscabo o generaba algún tipo de conflicto, la segunda; que se usaba era la 4.808 del Registro Civil esta como establecía que no se puede dar un nombre equívoco al sexo, es decir, si me llamo Sara y entendemos que es un nombre de mujer y en mi identificación aparece “masculino”, entonces esto no debía ser posible y se cambiaba el sexo-género. Antes de esto se ocupaba solo la ley del cambio de nombre y esta únicamente estaba asociada a cirugías conocidas como feminización o masculinización y trámites patologizantes. De hecho, los primeros cambios de nombre y sexo legal que se hicieron en Chile fue a mujeres trans, a partir del 2005 fue se registraron rectificaciones de trans masculinos u hombres trans. Esta fue la primera vez que no exigieron una faloplastia sino que le pidieron a la persona que se hiciera una mamoplastia y se sacara el útero y los ovarios. Luego eso evolucionó y sólo le exigían a las personas que certificaran que vivían por ejemplo como “hombres” o “mujeres” durante 5 años”.
Hasta la fecha se han agendado 1.653 reservas de horas
Jorge Álvarez director nacional del Servicio de Registro Civil e Identidad publicó en su cuenta en twitter que hasta la fecha se han efectuado 1.114 audiencias especiales y hasta la fecha se han agendado 1.653 reservas de horas para este trámite.
https://twitter.com/jorgealvarezv/status/1221786415719178246?s=21
Al cerrar esta nota Valeria Pinto hizo un llamado a las personas trans que quieran realizar este importante trámite, recordando que es público y gratuito. Por su parte Noah López, quien solicitó la audiencia para el cambio de nombre y sexo registral junto a Valeria el 16 de diciembre y además protestó tapándose el ojo frente al ministro de justicia, Hernán Larraín, aún no cuenta con su nuevo carnet de identidad.
Diosceline Camacaro Martínez