21 DE NOVIEMBRE DE 2016 (Nueva York) – El mandato de las Naciones Unidas del Experto Independiente sobre la orientación sexual y la identidad de género (SOGI por sus siglas en inglés) ha sido salvaguardado a pesar de la contestación hostil en la 71ª sesión de la Tercera Comisión de la Asamblea General de las Naciones Unidas Nueva York.
Les defensores de derechos humanos y organizaciones LGBTIQ de todo el mundo rápidamente se movilizaron para expresar sus preocupaciones sobre las implicaciones de la resolución hostil y hablaron con sus gobiernos nacionales, así como con la sede las Naciones Unidas en Nueva York.
La posición del Experto Independiente SOGI sobre la ‘Protección contra la violencia y la discriminación basada en la orientación sexual y la identidad de género (SOGI)” fue encomendada mediante la aprobación de una resolución histórica la A/HRC/RES/32/2 el 30 de junio de este año, y el mandato es representado por Vitit Muntarbhorn, un experto de los derechos humanos de Tailandia. Una campaña hecha por 628 organizaciones no gubernamentales de 151 países que abogó por la adopción de la resolución y por el establecimiento del mandato.
A principios de noviembre, Botsuana, en nombre del Grupo Africano, presentó una resolución hostil sobre el Informe Anual del Consejo de Derechos Humanos, dirigida específicamente al mandato del experto independiente SOGI. La resolución impugnó la legalidad de la creación del mandato, argumentando esencialmente que la orientación sexual y la identidad de género no están universalmente reconocidas como derechos humanos y no están codificadas en el derecho internacional. En la resolución se pedía el aplazamiento del mandato hasta que se llegara a un consenso sobre la definición de SOGI y la base jurídica con la que se había creado el mandato.
“Estamos alarmados de que el Consejo profundice en cuestiones que corresponden esencialmente a la jurisdicción interna de los Estados, contrarias al compromiso de la Carta de las Naciones Unidas de respetar la soberanía de los Estados y el principio de no intervención. Más importante es el uso siniestro de las dos nociones: la orientación sexual y la identidad de género. Queremos señalar que esas dos nociones no están ni deben estar vinculadas a los instrumentos internacionales de derechos humanos existentes”
En respuesta a la resolución del Grupo Africano presentada por Botsuana, Monica Tabengwa, activista de derechos humanos de Botsuana y directora de Pan África ILGA, comentó:
“Estamos profundamente decepcionados por el hecho de que Botsuana haya llevado a cabo este movimiento del Grupo Africano que buscaba eliminar el hecho de que el CDH incluyera la protección a la SOGI dentro del marco de derechos humanos existente. Recordemos a todos que el mandato SOGI es sobre personas reales y su derecho a asegurar vidas, a estar libres de violencia y discriminación y que estas vidas no pueden posponerse ni aplazarse indefinidamente. Merecemos más de nuestros gobiernos”
El Experto Independiente de SOGI fue creado tras la adopción de una resolución en el Consejo de Derechos Humanos en junio de 2016, iniciada por siete países de América Latina, Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, México y Uruguay. Estos países, además de El Salvador, contrarrestaron el intento del Grupo Africano de aplazar el mandato mediante la introducción de una enmienda a la resolución que suprime el párrafo hostil.
Una nota explicativa de los ocho países latinoamericanos sobre la enmienda presentada en apoyo a la preservación del mandato SOGI y la integridad del Consejo de Derechos Humanos
“La gravedad de las consecuencias (…) reside en el hecho de que nunca antes un país o grupo de países ha intentado desafiar a un mandato especial de los procedimientos realizados por parte del Consejo de Derechos Humanos cuando ya hay un titular de mandato equipado y en pleno funcionamiento (…) Si la Asamblea General vuelve a abrir el informe anual del Consejo y el uso de un enfoque selectivo al cual esta resolución busca hacerlo por medio del bloqueo o aplazamiento indefinido esto socavaría fundamentalmente la autorización otorgada al Consejo por la Asamblea General, lo que tiene implicaciones de largo alcance, incluso más allá de la resolución específica que está bajo consideración”
Mientras que los 193 países de la Asamblea General de la ONU tenían el derecho al voto, solamente 161 ejercieron su voto, lo que resulta en el fracaso de la resolución hostil y la disipación de la amenaza inmediata contra el establecimiento del experto independiente en temas SOGI. Sobre la enmienda propuesta por el LAC8, En 77 países, votaron en contra de la resolución, y 84 a favor de la resolución, y 17 se abstuvieron. Si: 84 No: 77 Abstención: 11, y la resolución final con la enmienda del LAC8 fue aprobada por 94 votos a favor.
La sociedad civil LGBTIQ en la región de Asia y el Pacífico han vocalizado su apoyo al experto independiente SOGI, con la esperanza de que un representante de la región ayudará a la protección y al progreso de las personas que tienen una orientación sexual e identidad de género diversa. En respuesta a la votación Ryan Silverio, Coordinador Regional del ASEAN SOGIE Caucus, dijo:
“Hoy se nos recuerda la misión fundamental del Consejo y el compromiso de la ONU de promover los derechos humanos y la igualdad para todos. Nos sentimos alentados por el diálogo abierto con los Estados miembros de la ASEAN en el momento de la votación, y estamos especialmente agradecidos con Tailandia por mostrar su liderazgo en la protección de este mandato”
El fracaso de la propuesta de resolución hostil es significativo, no solo porque restablece la autoridad del Consejo de Derechos Humanos, sino que también permite avanzar en el trabajo del Experto Independiente SOGI, un paso crucial en el compromiso de la ONU de proteger la universalidad de los derechos humanos, especialmente para las comunidades vulnerables. Refuerza la noción de que la gente no puede ser dejada atrás y los Estados deben proteger a todas las personas de la discriminación y violencia basada en su orientación sexual e identidad de género.
“La posición del Experto Independiente SOGI es vital para sacar a la luz los horribles actos de violencia y discriminación que muchas personas enfrentan debido a su orientación sexual o identidad de género. Estos abusos ocurren en todas partes; ninguna región o país es inmune a ellos. Tener una documentación concreta que muestre las consecuencias de la homofobia y la transfobia en las vidas de las personas y recomendaciones sobre cómo abordar estos desafíos ayudará a los Estados a asumir la responsabilidad de proteger a las personas LGBTQI. Será mucho más difícil ignorar los hechos”, comentó Micah Grzywnowicz, activista trans y consejera de defensa internacional en RFSL, la Federación Sueca de Derechos LGBTQ.
Mientras que la resolución hostil no pasó hoy, la sociedad civil ha advertido que los intentos futuros de detener el progreso del Experto Independiente no están fuera de la cuestión.
Se encargará al Experto que evalué la aplicación de la legislación internacional en materia de derechos humanos, identifique las mejores prácticas y los vacíos existentes, sensibilice sobre la violencia y la discriminación basada en la orientación sexual y la identidad de género, entable diálogo y la consulta con los Estados y otras partes interesadas y facilite la prestación de servicios: servicios de asesoramiento, asistencia técnica, creación de capacidad y cooperación para ayudar a combatir la violencia y la discriminación por estos motivos.
“Como siempre, la lucha continua para asegurar que los Estados no escogen que derechos humanos proteger. Debemos seguir vigilando y movilizarnos para garantizar que la universalidad y la no discriminación triunfen en todos los niveles. También debemos asegurarnos de que estamos trabajando juntos para crear un cambio que beneficie a todas las personas LGBTIQ. La salvaguardia de los principios de derechos humanos sigue siendo primordial para la paz y la seguridad de todas las personas en todo el mundo, en cualquier momento”, dijo Steve Letsike, Director de Access Chapter 2, una organización sudafricana de derechos humanos LGBTIQ