Gracias al programa de Identidad de Género del Complejo Hospitalario Sótero del Río, lanzado oficialmente en enero pasado y donde hoy se atienden aproximadamente 160 personas trans, el establecimiento de salud incluyó en su sistema informático la categoría “persona trans”, dejando de lado términos como disforia de género, transexualidad o trastorno de la identidad de género.
La matrona del Servicio de Salud Metropolitano Sur Oriente, Cynthia Aránguiz, quien es parte del equipo del programa, cuenta que fue un trabajo de varios meses hacer el cambio y que implicó una conversación de cuáles eran las palabras más adecuadas. “Nuestra idea siempre ha sido que no se trabaje desde la patología”.
El cambio se realizó en el sistema de agenda de endocrinología de adultos y pasó de transexualismo a persona trans. Antes habían varios diagnósticos y, como existía el programa, quedaba a criterio del profesional cómo completaba el diagnóstico. Este cambio fue propuesto por el equipo del programa para aunar criterios, contribuirá a las estadísticas y a ordenar las horas de atención, además de ser un avance en la despatologización de las identidades trans.
“Es super difícil exigir un cambio de un momento a otro, pero el ingeniero biomédico, Giovanni Inostroza, está super sensibilizado y nos ha ayudado con la implementación del programa”, explica la profesional. Para le coordinadore ejecutive de OTD Chile, Michel Riquelme, este es un avance histórico para la comunidad. “Es una demanda que hemos pedido a las autoridades de salud durante muchos años y siempre nos la negaban. Nuevamente esto evidencia que el tema de ir quitando barreras en el acceso a salud para las personas trans es un tema de voluntades políticas”.
Elle espera que esto se replique en otros centros de salud, especialmente porque la patologización es una gran carga que llevan muchas personas. “Esto es una muestra de igualdad en el trato, de que nos comiencen a ver tan personas como a las y los cisgénero. No nos tienen por qué clasificar como personas con alguna patología o enfermedad simplemente porque experimentamos un tránsito de género”.
Finalmente, un avance que ahora está en proceso es vincular a les usuaries del programa con los distintos Centros de Salud Familiar de la zona sur oriente para que accedan a la atención primaria y cubrir necesidades de salud que no tienen que ver con el tránsito de género. Además, para junio está planificada una nueva capacitación para les funcionaries del Hospital sobre Diversidad Sexual y Diversidad de Género.
