Durante esta semana finalizó el primer ciclo de talleres y capacitaciones generados por activistas trans para la comunidad. Con apoyo del Fondo Alquimia se lograron educar a cerca de 500 personas de diferentes áreas: educación, psicología, trabajo social, personal del Sename y también del Consejo Nacional de la Infancia, entre otros.
De un total de 16 talleres, con nueve colegios, universidades, sindicatos de trabajadores, la Oficina de la Mujer de la Municipalidad de Concepción y de Renca y también al Servicio de Salud de Osorno. Además con cuatro capacitaciones completas a todas las duplas psicosociales de la Municipalidad de Recoleta, de La Cisterna y al Consejo de la Infancia y Sename.
“La idea de poder generar estas capacitaciones y talleres a la población es entregar conocimientos que no se centran en una linealidad cisexual, sino que presentan un abanico de realidades y se permite ver la manera en la que las personas trans son vulneradas, muchas veces por personas que trabajan en las mismas instituciones capacitadas, cuyo compromiso hoy fue aumentar la preocupación y observar todos los casos con mayor detención para poder prestar la ayuda necesaria en los casos pertinentes”, dice Armando Escoffier, coordinador del proyecto OTEDUCA.
Este proyecto comenzó en Enero, con la planificación y diseño de los talleres y capacitaciones. El primer taller piloto se realizó en las dependencias de OTD Chile, con invitades de diferentes áreas.
“Se hace necesario poder compartir nuevos saberes con personas que deben a diario relacionarse con personas trans, personas que no tienen idea de la realidad que vivimos las personas trans, para poder generar nuevos métodos de convivencia de los que no dependan la vida de las personas“, explica Fernando Ojeda, parte del proyecto. “Estos talleres son esencialmente vivenciales, en base a la experiencia trans”.
Romina Kurth, asesora del Consejo Nacional de la Infancia explicó que “para nosotros la capacitación realizada por OTEDUCA de OTD Chile fue tremendamente enriquecedora (…) primero que nada creo que es fundamental para el sector público y en particular el sector que trabaja directamente con niños/niñas o adolescentes sencibilizarse o saber mucho más sobre la tematica trans, y la diversidad en general en particular la vivencia y la niñez trans. El formato, la metodología y las personas que imparten la capacitación fue para mi gusto tremendamente idónea”.
Constanza Valdes
Romina Becerra, trabajadora social del área intersectorial en el Consejo Nacional de la Infancia “hemos solicitado a la OTD poder realizar la capacitación de OTEDUCA específicamente en lo que tiene que ver con niños, niñas y adolescentes, y fue un espacio muy positivo en tanto el matiz educativo y como instancia necesaria para el Estado principalmente, ya que el Estado está recientemente abordando la temática trans y el trabajo que ha hecho OTD es fundamental“.
Con un equipo interdisciplinario OTEDUCA posee una coordinación pedagógica a cargo de Elizabeth Manríquez, y asesoría jurídica a cargo de licenciada en Ciencias Jurídicas Contanza Valdes. Como facilitadores y apoyo constante del proyecto Kris Córdova, Franco Fuica, Carol Barragan, Franco López, Fernando Bravo, Constanza de la Cerda y Fernando Ojeda.
Quienes también estuvieron encargados de la creación de folletos, la revista Le Trans y un cuadernillo que resume conceptos, experiencias y teoría, las que además sirven para compartir el conocimiento ya que también cuenta con material para que quienes fueron educados ahora eduquen.
“Fue muy intenso, una capacitación muy intensa, la gente terminaba agotada, porque era todo nuevo, tan nuevo que ahora sé que los profesionales -duplas psicosociales- están replicando los contenidos aprendidos y generando cambios“, dice Carmen Morales, encargada del área de Convivencia Escolar en la Municipalidad de Recoleta.
Las capacitaciones contaban con etapas en las que la personas podían aprender jugando, sintiendo, conversando y observando. Jugaban con un dado gigante mientras se cuestionaban el género y la expresión de género de sus pares. Sentían texturas y aprendían sobre los cambios de los cuerpos. Conversaban y escuchaban experiencias trans, y también podían ser parte de una exposición con la historia invisibilizada trans.
