En el marco del Día Internacional contra la Homofobia y la Transfobia, en el nuevo capítulo de El Informante se analizó la realidad de los niños transexuales en nuestro país. Para ello, Juan Manuel Astorga conversó con Alexa Soto, activista transexual; Evelyn Silva, directora de la fundación Transitar y madre de una niña transexual; y con Magdalena Fabbri, licenciada en psicología, activista transfemenina y coordinadora de la organización Trans Diversidad y OTD Sur Concepción.

Magdalena Fabbri comenzó explicando que su historia “fue un proceso de descubrimiento, porque por lo menos cuando era niño fluía bastante con lo que yo jugaba. Me gustaban las muñecas, probarme la ropa de mi mamá… Y eso después se fue anulando a medida que iba avanzando socialmente el tema de las presiones de empezar a ser hombre. Después de eso, yo llego a la universidad y siento como que tengo que ser un hombre de verdad. Ahí dije ‘no, esto no es para mí’ y me puse a investigar. Encontré por internet la palabra trans y dije ‘eso yo soy’, pero me costó mucho aceptarlo”.

Luego, Alexa Soto explicó que “creo que me he sentido mujer toda la vida. Hay algo social que todo el rato te dice que ‘no puedes ser mujer si naciste hombre’, que es distinto. Cuando era pequeña todo el rato pensaba en ser mujer, pero también pensaba en la transición que tenía que pasar para ser mujer y me aterraba. Decía ‘me conformo con ser un hombre homosexual, es mucho más fácil’.

Ante la consulta de qué es lo que más le han preguntado sobre su transexualidad, Soto respondió que “sobre mis genitales, de todas maneras. Es la pregunta más frecuente a las personas trans, sobre si tenemos vagina o tenemos pene. Todo se reduce a eso, pero los genitales no te hacen mujer ni hombre”.

Juan Manuel Astorga aclaró que la identidad de género no necesariamente va acompañada de la orientación sexual.

Evelyn Silva, que tiene una hija transexual, afirmó que “con Selena fue bien complejo, porque ella era muy chica, tenía tres años y medio cuando mostró sus rasgos de querer hacer una transición. Fue en 2013, donde además el tema de las niñas trans no estaba instaurado. Ella despertaba todos los días y me decía ‘¿ya mañana puedo ser niña, mamá?, ¿ya mañana puedo ser mujer?, ¿ya mañana me vas a cambiar el nombre?’. Pero para nosotros no era un tema, pensábamos que era una etapa, que se le iba a pasar o que estaba imitando. Cuando entró al jardín fue cuando empezaron los problemas”.

Identidad de género en el Parlamento

 

Más adelante, las diputadas María José Hoffmann (UDI) y Yasna Provoste (DC) se refirieron a las iniciativas que discuten sobre la identidad de género en nuestro país.

Provoste comenzó explicando que “hay un conjunto de iniciativas que buscan garantizar derechos de la niñez y la adolescencia. Una de ellas ya terminó su tramitación en la Cámara de Diputados y está en el Senado. Quiero valorar el esfuerzo que ha hecho el Gobierno, a través del Ministerio de Educación y de la Superintendencia de Educación, de elaborar instructivos y orientaciones para los establecimientos educacionales para dejar atrás estas situaciones de discriminación vivían estudiantes de nuestro país”.

Sin embargo, Hoffmann afirmó que “creo que la forma que ha tenido el Gobierno con este instructivo ha sido un error. Dejar de lado a los padres, a los colegios… Esto no se trata de tener un baño más o de tener un baño menos, se trata de incluir de verdad de asumir esta realidad, de protegerlos. Creo que a través de una imposición, como ha sido este instructivo, demuestra como el Gobierno una vez más sólo quiere cumplir con un eslogan en vez de hacerse cargo de una realidad de la sociedad”.

“Yo no creo que un niño de cinco años tenga la capacidad de definir si se siente mujer u hombre. Es una responsabilidad que se debe entregar a los padres”, agregó la diputada UDI.

Luego, la diputada DC expresó que “el proyecto de Garantías de Derechos de la Niñez y de la Adolescencia, que se despacharon hace dos semanas desde el Senado, fueron objeto de muchísimas indicaciones. Creemos que era necesario mejorar este proyecto, hacer aportes, como por ejemplo que cualquier persona pudiese interponer un recurso en favor de los niños y niñas”.

Fuente: 24horas.cl